martes, 26 de junio de 2007

THE CRITIC ♣ ◙ ♣*

Esas pequeñas cosas (Vistas desde la tierra, claro)


Sobre el cometa C/2006 P1 McNaught


Un día miércoles con sabor a pasto en la lengua después de masticar un chicle de cinco centavos de esos ya casi extinguidos en los quioscos o almacenes mas próximos a nuestro domicilio me muestra que el cielo esta parcialmente nublado y que el cometa que prometieron los astrónomos no será visible fácilmente desde este desierto mientras doy un paseo por el mini centro y veo un tipo que observa varices en movimiento mientras se fuma un cigarrillo y delante de su boca veo un cigarrillo que se fuma unos pulmones mientras en la esquina una señorita observa su teléfono celular, esperando quizás un mensaje de fulano de mengano de zutano o de metano y digo metano y recuerdo que deje las perillas de la cocina abiertas y empiezo apresurar la marcha hacia el oeste y veo por el camino a tres pìbes parecidos al tío cosa con los pelos tan largos que les llegan casi a las rodillas y les oigo decir frases como “boludo, no es cierto…”, “boludo, en serio…” y “boludo, que bueno…”; entonces intuyo que boludo + boludo + boludo es el tercero en discordia que les va a proveer de una cierta sustancia alucinógena que consumirán dentro de siete minutos mas en una plaza, cuando empiece a atardecer y las calles que rodean a la esa plaza se llenan de automóviles con vidrios polarizados y de bodrios estandarizados que significaran un dolor de cabeza a los nueve meses. Y sigo apurado, pero una luz roja sobre un fondo amarillo me dice que me detenga en una esquina y una mano se estira y me deja un tarjeta de un boliche que invita a la fiesta de la cerveza X y que presentándola se obtiene unos cuantos litros de cerveza sin cargo (de conciencia para el dueño del local), entonces uno se pregunta por lo campos de cebada que se cosechan para hacer junto con otros ingredientes un fermento alcohólico de mas de 4.9 grados que dentro de una botella de color marrón sirve para conocer gente, para hacer amistades, para conocer a una chica alcohólica que será nuestra ¿novia? Por tres horas y para rompérsela en la cabeza aun pibe que nos miro mal y que pasara un par de horas en el hospital. Entonces, la luz verde me dice que avance, llego a casa y me doy cuenta de mi perro no murió por inhalación de gases tóxicos, porque no alcanzo la plata para pagar la boleta de gas de este mes y entonces salgo al patio y alzo la mirada al cielo para agradecer y alcanzo a observar el tan promocionado cometa como una lucecita tímida que se pierde tras los cerros y siento que soy el único que no lo ve a través de Internet o bajo los efectos de algún alucinógeno colombiano.